SALTO Y CARRERA: LAS DOS CARAS DE LA MISMA MONEDA

El salto es una forma de desplazamiento en la que nuestro cuerpo se mueve en el aire siguiendo las leyes de la balística. Esto quiere decir que la trayectoria de vuelo dependerá:

  • de la inercia que logremos generar en la fase de impulso
  • las fuerzas intrínsecas del medio sobre el que se desplaza, que principalmente será la gravedad.

Actividades como la carrera, tienen mucho que ver con el salto. Cuando corremos, experimentamos una fase de vuelo en la que la totalidad de cuerpo se desplaza tanto horizontal como verticalmente en el aire sin ningún tipo de contacto con el suelo. De hecho, es la fase de vuelo, y no la velocidad, la que marca la diferencia entre la carrera y la marcha. En esta última, siempre existe un punto de contacto con el suelo durante todo el ciclo.

Si observamos a los marchistas, son capaces de alcanzar altas velocidades sin levantar el vuelo en ningún momento. Serguéi Kirdiapkin batió en los Juegos Olimpicos de 2012 el record en los 50 km marcha con una velocidad media de casi 14 km/h. Pero no corre, si no que camina deprisa (muyyyyyyyyyyy deprisa…!!)

Debido a que los tiempos de vuelo en la carrera son demasiado cortos, no sería correcto englobarla en la categoria de “saltos” como tal. Sin embargo, neuromuscular y biomecánicamente comparten muchas similitudes.

¿Que estructuras anátomicas están implicadas en un salto?

Nuestro cuerpo cuenta por un lado, con los tendones y músculos, que son las estructuras anatómicas capaces de absorber y generar energía elástica de manera eficiente y por otro lado con el sistema nervioso que controla de manera refleja el ciclo acortamiento-estiramiento y a nivel cortical el control motor del gesto y su aprendizaje.

Así, la capacidad de realizar un salto depende de varios factores:

– La elasticidad del sistema músculotendinoso.

– El stiffness o rigidez biomecánica del sistema músculotendinoso.

– La potencia muscular: se entiende como la capacidad de generar el máximo de fuerza en el menor tiempo posible.

– El reflejo de estiramiento.

– El control motor relacionado con el aprendizaje del gesto.

¿Cómo se desarrolla un salto?

Existen 3 fases fundamentales en la ejecución de un salto:

1. Fase excéntrica: los músculos y tendones implicados en el salto se estiran. Durante esta fase se almacena energía elástica y los receptores de estiramiento situados en el músculo comienzan a mandar señales a la médula espinal. Cuanto mayor y más rápido sea el estiramiento, mayor cantidad de energía acumulamos.

2. Amortiguación: la médula, mediante un mecanismo reflejo para proteger al músculo de un exceso de estiramiento, manda señales para que se produzca el acortamiento muscular. Es una fase de transición y para que el aprovechamiento de energía sea óptimo, lo ideal es que sea lo más corta posible. De otro modo, parte de la energía almacenada se disipa en forma de calor.

3. Fase concéntrica: el músculo se contrae (se acorta) y se libera la energía elástica acumulada.

¿Y esto que tiene que ver con la carrera?

La progresión del miembro inferior durante una zancada cumple las tres fases enumeradas anteriormente: contacto, amortiguación y propulsión. Por lo tanto, si tenemos adaptado nuestro sistema neuromuscular gracias a un trabajo de pliometría previo, seremos capaces de:

– Generar más energía en menos tiempo.

– Acortar la fase de amortiguación y a la vez amortiguar de manera eficaz.

– Aumentar la fase de propulsión: propulsar mejor y durante más tiempo.

Todo esto, en definitiva nos lleva a una mejora de la potencia y una disminución del riesgo de lesiones.

En conclusión, el entrenamiento de carreras de larga distancia no es meramente una cuestión de resistencia. También es cuestión de potencia y control motor. De hecho, la resistencia, como ya vimos en “¿Correr para estar en forma?” es posible e incluso deseable entrenarla por otros medios. Los atletas de velocidad lo tienen claro: generar el máximo impulso en el menor tiempo posible y con la menor perdida de energía posible.

Nota: aunque los efectos del entrenamiento de pliometria son claros, se aconseja que para evitar lesiones, se realice de manera progresiva y preferiblemente controlada por un profesional.